El sangrado frecuente de encías podría ser un signo de periodontitis, una enfermedad inflamatoria crónica que afecta los tejidos que sostienen los dientes. Suele comenzar como gingivitis y, si no se trata, puede avanzar hasta causar la pérdida dental.
La causa principal es la acumulación de placa bacteriana. Factores como el tabaquismo, la diabetes o una mala higiene bucal aumentan el riesgo.
Entre los síntomas más comunes se encuentran encías inflamadas, mal aliento, sangrado al cepillarse y movilidad dental.
Aunque es una enfermedad seria, es prevenible y tratable con una buena higiene oral y controles odontológicos regulares. Detectarla a tiempo es clave para evitar daños permanentes.
