Durante el Festival Aéreo de Gijón, un avión de combate F-18 del Ejército del Aire generó momentos de tensión al ejecutar una maniobra de evasión a muy baja altura, sobrevolando a escasos metros de cientos de bañistas en la playa de San Lorenzo.

La maniobra fue captada en video por varios asistentes y rápidamente se viralizó en redes sociales, donde se aprecia el descenso del caza a gran velocidad mientras emite una estela de humo negro. Muchos espectadores reaccionaron con gritos y expresaron temor ante lo que interpretaron como una acción peligrosa.

Según el comunicado oficial del Ejército del Aire y del Espacio, el piloto realizó una maniobra de seguridad tras detectar una bandada de aves en su trayectoria, lo que obligó a ejecutar una acción rápida para evitar un posible impacto. Las autoridades aseguraron que se trató de una respuesta dentro de los protocolos establecidos y que no se puso en riesgo la seguridad del público.

Festival Aéreo de Gijón es uno de los eventos aeronáuticos más importantes de España, y congrega cada año a miles de asistentes. Este episodio ha generado debate sobre las condiciones de seguridad en espectáculos de este tipo y los límites de las maniobras cerca de zonas urbanas o concurridas.